Vale por un beso...

Hace unos meses que cambie de trabajo, pero como todo el mundo, siempre hay alguien en el trabajo con el que congenias y continuas manteniendo contacto a pesar de cambiar de empresa. En mi caso, congenié muy bien con una compañera y a pesar del cambio las dos hemos seguido viéndonos y quedando.

En una de las quedadas que hicimos, por una serie de circunstancias David también nos acompañó, y la verdad es que lo estábamos pasando genial los tres... David y mi compañera (amiga) congeniaron muy bien y claro, yo estaba en la gloria.

El caso es que después de unas copitas terminamos hablando de sexo, y aunque mi amiga no sabía nada de lo que hacíamos David y yo, finalmente terminamos contándola alguna que otra cosilla mientras tanteábamos el terreno... y la verdad, es que yo estaba superexcita de ver como a mi amiga le gustaba y le encantaba todas las cosillas que le íbamos contando...

Después de estar un rato largo hablando de sexo y de alguna que otra experiencia que teníamos David y yo, mi amiga comenzó también a contarnos alguna que otra cosilla... entre ellas alguna de sus fantasías... y la verdad es que yo ya me estaba poniendo mala de escucharla...

David y yo estábamos escuchándola hablar y estábamos absortos... tenía un montón de fantasías pendientes de cumplir pero por temor a no ser comprendida por nadie nunca lo había hablado con nadie, ni si quiera con las parejas que había tenido... una de sus fantasías era estar con una chica y un chico al tiempo pero no quería hacer un trio, sino más bien quería poder jugar con ellos y poder crear situaciones de morbo... ella cada vez que nos contaba algo se sonrojaba pero al ver que nosotros la entendíamos poco a poco esa sonrojez la fue olvidando...

Una vez que la cita se dio por concluida, cada uno se marcho para su casa. David y yo estuvimos todo el camino hacia casa hablando y comentando todo lo que habíamos visto, los dos estábamos superexcitados por lo que mi amiga nos había contado y por haber podido contarla en parte algo de nuestras aventurillas...

Decidimos entonces buscar una manera para que mi amiga pudiera hacer efectiva esa fantasía pero que pudiera marcar ella misma los pasos para lograrlo... y se nos ocurrió una idea quizá un poco atrevida pero que esperábamos que ella al menos lo encontrara como un gesto simpático...

Tras haber preparado bien nuestra idea, y tras unas semanas en las cuales mis conversaciones con mi amiga eran más frecuentes, quedamos en su casa. David y yo estábamos un poco nerviosos pues llevábamos preparada nuestra idea pero no queríamos importunarla y mucho menos que ella se sintiera incomoda...

Al llegar a la casa nos pusimos los tres en el comedor mientras mi amiga nos sacaba algo para tomar y picar, estuvimos charlando de todo un poco, hasta que nuevamente salió a relucir el tema del sexo... y fue ella quien lo saco al confesarnos que nunca se había sentido tan agusto hablando de sexo con alguien como con nosotros... eso a nosotros nos dio confianza y tras mirarnos David y yo un segundo, decidimos mostrarle a mi amiga la idea que teníamos para que hiciera realidad aquella fantasía que aquel día nos había contado...

Entonces tomé yo la palabra y le dije a mi amiga:

Hemos pensado en la fantasía que quieres cumplir y nos gustaría ayudarte, por eso hemos pensado que quizá con esto puedas cumplirla. Si esta idea no te gusta no pasa nada, seguro que habrá otras maneras y formas de que la consigas y nosotros trataremos de ayudarte.

Entonces le entregué a mi amiga una cajita de color roja cerrada con un lazo blanco en la cual había una tarjeta que ponía: Esperamos que tu fantasía algún día se haga realidad...

Mi amiga cogió la caja, quitó el lazo y abrió la caja... dentro había unas papelitos, los sacó de la caja y comenzó a leerlos para sí misma mientras los iba pasando... David y yo la mirábamos esperando saber si la gustaría si no la gustaría... Tras unos momentos de espera, por fin nos miró... comenzó a pasar un papel tras otro hasta que se detuvo en uno... y leyó en alto: Vale por un beso de David...

David y yo nos miramos, la miramos y entendimos que nuestra idea la había gustado... David se levantó mientras ella se acercaba a él, sus labios se aproximaron, al principio el beso sólo fue un leve roce entre sus labios, pero al instante ella se aproximo más a él y pude ver como su lengua pasaba a jugar con la de David... yo desde el sofá veía la escena excitada y temerosa por ver como actuaría mi amiga ahora... entonces dejó de besarle los labios, me miró fijamente y la devolví la mirada... siguió pasando los papeles hasta parar en uno de ellos... y dijo en voz alta... Vale por un beso de Sandra... yo me quede en el sofá, esperé a que llegara, se sentara a mi lado y una vez estuvimos sentadas las dos, me volví hacia ella, posé mi mano sobre su pierna mientras sus labios buscaban los míos, nos miramos mientras nos aproximábamos y al cabo de unos segundos su lengua y la mía se entrelazaban en un largo beso...

Había más vales en esa caja, pero para ella ese día supuso un avance muy importante por lo que quería saborearlo y disfrutarlo, nosotros lo entendimos pues el día había sido muy emocionante y excitante... nos marchamos de su casa con muy buen sabor de boca y ella también pues al marcharnos nos dijo: el resto de los vales los usaré próximamente contar con ello...