Buenas!Hace unos días recibí un relato de un sandrero y la verdad es que me excité muchísmo mientras lo leía jiji
Así que he pensado en compartirlo con vosotros y que lo disfrutéis tanto como yo jiji ah! y claro que si alguno de vosotros se anima a escribirme otro... no dudéis en mandarmelo que ya sabéis que me encantan y me ponen cachondilla jijii
Así que he pensado en compartirlo con vosotros y que lo disfrutéis tanto como yo jiji ah! y claro que si alguno de vosotros se anima a escribirme otro... no dudéis en mandarmelo que ya sabéis que me encantan y me ponen cachondilla jijii
Era mediados de agosto, David había leído en un revista de viajes que existía una región, al sur de Francia, en la costa Atlántica, llamada Las Landas, que tenia unas playas absolutamente espectaculares, con lugares de naturaleza perdidos, vírgenes y que eran el templo de los surfistas de medio mundo. Le queria dar una sorpresita a Sandrita, que estaba harta de ir a los monótonos lugares siempre, queria llevarla a un lugar donde pudieran dar rienda a sus fantasías, con gente diferente, en un sitio tranquilo y relajado, así que como pronto llegaba el puente del 15, se lo comento y acepto la idea.
Pronto llego el día en que se pusieron en camino del lugar elegido, que era una localidad costera se llamaba Viex-Bocau, quedaba como a 5 horas en coche desde Madrid y 1.30 cruzando la frontera por Irun, al llegar buscaron uno de los múltiples camping que existen, ya que apenas hay hoteles al ser un paraje protegido natural. Enseguida eligieron uno, que según la guia, tenia acceso directo a la playa y después de montar una pequeña tienda de campaña, se fueron a dar una vuelta por el pueblecito que quedaba a un par de kilometros, descubriendo un lugar encantador lleno de tienditas, de terrazas coquetas y ese ambiente francés en lo que todo parece puesto en el lugar exacto.
Sandrita se percato de que había mucho ambiente joven y sobre todo surferos, chicos rubios, con la tez muy morena y unos cuerpos fibrosos, que la perdían...se lo dijo a David, y este le susurro al oido "esta noche te lo haré imaginando que estás con uno de ellos", y claro, así fue.
Pronto llego el día en que se pusieron en camino del lugar elegido, que era una localidad costera se llamaba Viex-Bocau, quedaba como a 5 horas en coche desde Madrid y 1.30 cruzando la frontera por Irun, al llegar buscaron uno de los múltiples camping que existen, ya que apenas hay hoteles al ser un paraje protegido natural. Enseguida eligieron uno, que según la guia, tenia acceso directo a la playa y después de montar una pequeña tienda de campaña, se fueron a dar una vuelta por el pueblecito que quedaba a un par de kilometros, descubriendo un lugar encantador lleno de tienditas, de terrazas coquetas y ese ambiente francés en lo que todo parece puesto en el lugar exacto.
Sandrita se percato de que había mucho ambiente joven y sobre todo surferos, chicos rubios, con la tez muy morena y unos cuerpos fibrosos, que la perdían...se lo dijo a David, y este le susurro al oido "esta noche te lo haré imaginando que estás con uno de ellos", y claro, así fue.
Al dia siguiente, estaban ansiosos por ir a pasar el dia a la playa, sabían que solo tenían que recorrer una pequeña senda y estaban allí, cargaron con sus mochilas, una sombrilla y algo para almorzar, en unos minutos contemplaban un extenso arenal dorado que se perdía en la inmensidad, donde salvo en una parte primera central donde se situaba la gente, en el resto no había nadie. Su primera reacción fue de grata sorpresa, acostumbrados a las atestadas playas del mediterraneo...asi que decidieron que se colocarían un poco mas alejados de allí, donde no había nadie.
Andaron un buen rato, pensaron que lo mejor seria estar tranquilitos por si tenían que hacer algo mas que ponerse crema. Una vez ubicados, David le sugirió a Sandri, que se pusiera ese tangita blanco que tanto le ponía y que el pensaba tomar el sol desnudo, ya que por allí no había nadie y le apetecía un montón... al rato ambos estaban relajados tostándose; el acariciaba con su mano su culete y mientras ella sentía como esa mano recorriendo la entre pierna le producía un maravilloso escalofrío, despertando su pasión sexual.
Después de un rato de recibir caricias y masajes, Sandrita puso la mano en su polla para ver como estaba y descubrió que la tenia durisima, exclamandole "oye como la tienes", en ese momento tumbaron la sombrilla hacia el lado donde había gente en la distancia y sabiendo que nadie les podía ver, empezó a mamarsela, en un principio de manera suave, para ir poco a poco con mayor intensidad; él después de un buen rato de gozar de su boquita, dio paso a comerle el chochito a ella, ésta solo tuvo que apartarse un poquito el tanquita para sentir la lengua húmeda lamiéndolo e introduciéndose en su interior.
Tras un ratito de puro placer, Sandrita se dio la vuelta, diciéndole "follame como a una perra", se puso a cuatro patitas, indicándole a David que la penetrara, a lo cual este no tardo ni un segundo, introduciendo en aquel coño que rebosaba de flujos...tras varias corridas de infarto, los dos cayeron exhaustos sobre las toallitas, abrazados, quedandose dormidos.
Cuando se despertaron, después de una hora de sueño, se dieron cuenta que ya no estaban solos, había un grupo de surferos, que se había situado apenas a unos metros de donde estaban ellos; eran un grupo, en su mayoría chicos y también alguna chica, jovencitos de apenas 20 años, y se cambiaban la ropa, desnudándose, para ponerse los trajes de neopreno, y a continuación ir al buscar olas...
Sandrita le echo el ojo a un par de ellos, le encantaban esos cuerpos delgados, fibrosos y morenos, con los que habia soñado la noche anterior, además ese acento francesito le ponía un montón, se lo dijo a David, "mira que par de niños más buenos, están para comerse a estos franceses", éste le indico "si, pero ahora son muchos para cazártelos".
La cosa se quedo ahi, sin más, la pareja paso toda la tarde bañándose, acariciadose, besándose lo que fue produciendo un calenton increible en ambos...cuando ya atardecia, el grupito de surfistas empezó a recoger y a irse, pero dos de ellos, precisamente los mas atractivos, se quedaron fumando un cigarro y charlando en sus toallas; David le sugirió a Sandrita, "mira se han quedado los dos, te los cazas" diciendole ella "vale, pero llevo mojada toda la tarde, así que no se que puede pasar", le afirmó él "bueno pasara lo que tu quieras... yo voy hacer como que me voy, luego daré un pequeño rodeo, me subo hacia las dunas y como he traído la videocamara te pienso grabar" exclamandole ella "ja,ja,ja... que guarrillo quieres que te haga un videoporno" a lo cual él le espeto "no espero menos de ti...".
Así que David, se vistió, recogió, su mochila y se despidió. Él anduvo un buen rato, para no llamar la atención, subiendo hacia las dunas, dando un revuelta para colocarse justo enfrente de donde estaba ella y los chicos, de tal manera que quedaba oculto a su visión, pero con un plano magnifico acrecentado por el zoom.
No hizo ni falta que ella saliera a su caza, a los pocos minutos, unos de los chicos, el mas moreno, se desplazo hasta donde ella y en un claro francés, le pregunto si tenia hora...ella, le dijo que no habla su idioma, que por favor en ingles... a lo cual entablaron una inmediata conversación, sobre de donde era, que hacia por allí, si estaba sola etc... al poco rato también se unió el amigo, que junto con el otro se sentaron a su lado, mientras ellos dos fumaban; ella permanecia tumbada solo vestida por su tangita blanca y aunque los chicos eran mucho mas jovenes, rápidamente empezó a sentir ese cosquilleo de que algo podia pasar... entre risas y coñas, no entendió que uno de ellos se ofrecía para darle un masaje en la espalda, pero este le vertió un buen chorro de aceite de coco, a ella ya le daba igual, por lo que no se opuso para nada, este se colocó muy cerca de su cuerpo, empezando a masajear la parte de sus hombros, brazos y espalda, pero mientras ella habla con el otro, las manos fueron bajando hacia sus gemelos, muslos y culete.
David, sabia que en este punto cualquier cosa ya podía pasar, así que activo el rec, de la video-camara.
Andaron un buen rato, pensaron que lo mejor seria estar tranquilitos por si tenían que hacer algo mas que ponerse crema. Una vez ubicados, David le sugirió a Sandri, que se pusiera ese tangita blanco que tanto le ponía y que el pensaba tomar el sol desnudo, ya que por allí no había nadie y le apetecía un montón... al rato ambos estaban relajados tostándose; el acariciaba con su mano su culete y mientras ella sentía como esa mano recorriendo la entre pierna le producía un maravilloso escalofrío, despertando su pasión sexual.
Después de un rato de recibir caricias y masajes, Sandrita puso la mano en su polla para ver como estaba y descubrió que la tenia durisima, exclamandole "oye como la tienes", en ese momento tumbaron la sombrilla hacia el lado donde había gente en la distancia y sabiendo que nadie les podía ver, empezó a mamarsela, en un principio de manera suave, para ir poco a poco con mayor intensidad; él después de un buen rato de gozar de su boquita, dio paso a comerle el chochito a ella, ésta solo tuvo que apartarse un poquito el tanquita para sentir la lengua húmeda lamiéndolo e introduciéndose en su interior.
Tras un ratito de puro placer, Sandrita se dio la vuelta, diciéndole "follame como a una perra", se puso a cuatro patitas, indicándole a David que la penetrara, a lo cual este no tardo ni un segundo, introduciendo en aquel coño que rebosaba de flujos...tras varias corridas de infarto, los dos cayeron exhaustos sobre las toallitas, abrazados, quedandose dormidos.
Cuando se despertaron, después de una hora de sueño, se dieron cuenta que ya no estaban solos, había un grupo de surferos, que se había situado apenas a unos metros de donde estaban ellos; eran un grupo, en su mayoría chicos y también alguna chica, jovencitos de apenas 20 años, y se cambiaban la ropa, desnudándose, para ponerse los trajes de neopreno, y a continuación ir al buscar olas...
Sandrita le echo el ojo a un par de ellos, le encantaban esos cuerpos delgados, fibrosos y morenos, con los que habia soñado la noche anterior, además ese acento francesito le ponía un montón, se lo dijo a David, "mira que par de niños más buenos, están para comerse a estos franceses", éste le indico "si, pero ahora son muchos para cazártelos".
La cosa se quedo ahi, sin más, la pareja paso toda la tarde bañándose, acariciadose, besándose lo que fue produciendo un calenton increible en ambos...cuando ya atardecia, el grupito de surfistas empezó a recoger y a irse, pero dos de ellos, precisamente los mas atractivos, se quedaron fumando un cigarro y charlando en sus toallas; David le sugirió a Sandrita, "mira se han quedado los dos, te los cazas" diciendole ella "vale, pero llevo mojada toda la tarde, así que no se que puede pasar", le afirmó él "bueno pasara lo que tu quieras... yo voy hacer como que me voy, luego daré un pequeño rodeo, me subo hacia las dunas y como he traído la videocamara te pienso grabar" exclamandole ella "ja,ja,ja... que guarrillo quieres que te haga un videoporno" a lo cual él le espeto "no espero menos de ti...".
Así que David, se vistió, recogió, su mochila y se despidió. Él anduvo un buen rato, para no llamar la atención, subiendo hacia las dunas, dando un revuelta para colocarse justo enfrente de donde estaba ella y los chicos, de tal manera que quedaba oculto a su visión, pero con un plano magnifico acrecentado por el zoom.
No hizo ni falta que ella saliera a su caza, a los pocos minutos, unos de los chicos, el mas moreno, se desplazo hasta donde ella y en un claro francés, le pregunto si tenia hora...ella, le dijo que no habla su idioma, que por favor en ingles... a lo cual entablaron una inmediata conversación, sobre de donde era, que hacia por allí, si estaba sola etc... al poco rato también se unió el amigo, que junto con el otro se sentaron a su lado, mientras ellos dos fumaban; ella permanecia tumbada solo vestida por su tangita blanca y aunque los chicos eran mucho mas jovenes, rápidamente empezó a sentir ese cosquilleo de que algo podia pasar... entre risas y coñas, no entendió que uno de ellos se ofrecía para darle un masaje en la espalda, pero este le vertió un buen chorro de aceite de coco, a ella ya le daba igual, por lo que no se opuso para nada, este se colocó muy cerca de su cuerpo, empezando a masajear la parte de sus hombros, brazos y espalda, pero mientras ella habla con el otro, las manos fueron bajando hacia sus gemelos, muslos y culete.
David, sabia que en este punto cualquier cosa ya podía pasar, así que activo el rec, de la video-camara.
Las manos eran suaves y energicas, para Sandra la sensacion de tener a los chicos allí estando casi desnuda, el aire del mar soplando, el calorcito de sol y las manos que cada vez iban avanzando mas hacia su coño, empezaron a ponerla muy cachonda... el masajita improvisado, ya no se cortaba, le estaba tocando todo los labios vaginales e incluso empezó a meterle un dedito.
El otro chico, se abalanzo sobre la boca de ella, fundiéndose en un enérgico beso, que duro varios minutos. La sensancion era única y electrizante, en un instante tenia cuatro manos acariciando su caliente cuerpo.
El otro chico, se abalanzo sobre la boca de ella, fundiéndose en un enérgico beso, que duro varios minutos. La sensancion era única y electrizante, en un instante tenia cuatro manos acariciando su caliente cuerpo.
Se dio la vuelta, sin separar su lengua de la boca del muchacho, mientras el otro le saco el tanga y le empezó a comer el coño, con mayor intensidad. Ella, exploro con su manos el interior del bañador del chico que la besaba, se encontró algo muy duro y rasurado, como justamente le gustan y al notar su mano, el le aproximo su miembro a la boca, con lo que deseándola, le empezó a mamar la polla sintiéndola como crecía aún más, en ese mismo momento notó como empezaba introducise una polla en su interior, se sintió lentísima y comenzo a moverse al ritmo del vaiven en que le se la mamaba al otro chico.
David alucinaba mientras seguía grabando, excitadisimo de los estaba contemplando; el primer chico se corrió enseguida, pero esta tumbo al otro chico en la toalla y empezó a cabalgar sobre su polla, consiguiendo otro orgasmo, que hizo que el también se corriera a la vez.
David alucinaba mientras seguía grabando, excitadisimo de los estaba contemplando; el primer chico se corrió enseguida, pero esta tumbo al otro chico en la toalla y empezó a cabalgar sobre su polla, consiguiendo otro orgasmo, que hizo que el también se corriera a la vez.
Ella quedo agotada en la toalla, los chicos que todavía ni se lo creían, recogieron y en un instante se fueron de allí, a los pocos minutos, vino David exclamando "que bueno, te superaste, lo grabe todo, lo titularemos...."
Un besazo para Miguel y otro para todos vosotros jiji
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